miércoles, 10 de diciembre de 2008

CARTA DULCE Y PEGAJOSA DE UN FAN DE MADONNA

UNA EXCELENTE PARADOJA ESCRITA POR MI AMIGO ROBERTO SANDOVAL SOBRE DOS SITUACIONES QUE NOS INVOLUCRAN A LOS CHILENOS TODOS. UN IMPERDIBLE PARA MEDITAR JUNTO A LOS JOVENES ESPECIALMENTE.


10 de diciembre de 2008
Carta dulce y pegajosa a un fan de Madonna:

por Roberto Castillo Sandoval

“Si no te da rabia es porque estás pajareando”. Cuántas veces no te han dicho eso los amargados que no tienen nada más que hacer que reclamar por cada faquin huevá que pasa. No les hagas caso. Quién te va a culpar, si ya la Pascua se viene encima y hay que pensar en el arbolito, los regalos, el vestido de graduación de la gorda, las primeras cuotas de los tickets para la Madonna.

Además, acuérdate que tu parte de llanterío por la mala cueva ajena ya la pagaste con los lagrimones de la Teletón, porque no es poco sacrificio trasnochar para ver si la meta se cumplía o no este año de crisis, demasiado suspenso. Este año ha sido duro en términos de lagrimones, hay que tomar en cuenta que se murió Julito Martínez, que se murió el general Bernales, que hubo ese accidente terrible de las niñitas en viaje de estudios en que todo los chilenos bien nacidos estuvimos de luto. Tanto futuro perdido, tanta ilusión cortada de cuajo y con tanta violencia. Cualquiera se agota de compasión y por eso es entendible que te quedes callado si es que te preguntan por Patricio Queipul.

Además, quizás en qué andaba el cabro chico metido en esos cerros perdidos en la Araucanía. ¿Quién va a creer que en pleno siglo veintiuno va a andar un par de guailones pastoreando animales? A esa edad los muchachos andan pendientes del Wii o del Facebook y no contando ovejas o arreando vacas por los faldeos cordilleranos. Mínimo, andaban haciendo la cimarra, porque era lunes en la mañana cuando los pilló el allanamiento.

Igual que tú, pienso que si uno ve que hay como cien detectives a caballo y de a pie haciendo un allanamiento en un cerro, obvio, uno no se va a meter ahí mismo, porque algo habrá en ese cerro, y si los cimarreros andaban dando vueltas por ahí, algo habrán tenido que ver. Si no, no se explica, y la culpa la tienen los padres que no están pendientes de dónde andan sus hijos los lunes en la mañana. Que no te vengan a preguntar a ti qué opinas.

O sea que sería raro que te diera rabia, porque en el fondo no pasó nada. En la Araucanía nunca pasa nada, con la excepción de cuando los encapuchados se ponen a quemar tractores o a tomarse potreros y bosques que pertenecen a gente de trabajo.

Porque la verdad es que, mirando todo en su contexto, no pasa nada cuando la Policía de Investigaciones detiene a un par de primos de 13 y 16 años, eso no es causa de escándalo ni para andarlo comentando por todo internet. Si esta generación es peligrosa: en CNN decían que un cabro chico de 8 años se echó a su papá a balazos, imagínate a los 13 o los 16.

Hay que tener cuidado, la infancia ya no es la de antes, ni menos la juventud. No es para alarmarse que a Patricio Queipul se lo hayan llevado preso a pata pelá, si esa gente está acostumbrada a andar así por los cerros, lo llevan en la sangre. Nada de qué sorprenderse si lo apuntaron con metralletas y pistolas, porque estos cabros mapuches andan siempre como con palos y son como balas para el hondazo, y además ¿qué quieren en un operativo policial, que los apunten con una flor o que los traten como señoritas, igual que en las películas gringas donde les recitan los derechos a los maleantes? ¿No saben los cabros inconscientes que la ley le exige demasiado al pobre policía con tanta adrenalina en el cuerpo? Un par de patadas no le hace daño a nadie en esas circunstancias, y estoy de acuerdo contigo en que una patá en la raja es preferible a un balazo. Y eso sin mencionar que se quejan de que los policías los insultaron cuando los estaban tomando presos. No hablan ni castellano y acusan. Hay que tomar en cuenta que el garabato es otra forma de botar energía para los hombres que son bien hombres y en circunstancias tan peligrosas.

No hay que olvidarse tampoco de que el tal Patricio Queipul ya había estado involucrado antes en hechos de violencia. De hecho, Carabineros de Chile, en octubre, se vio obligado a pegarle no uno sino siete perdigonazos. A los trigos limpios carabineros no los llena de plomo, ahí también estamos de acuerdo, sobre todo cuando se trata de gente que se mete en lo que no le importa y reclama con malicia cuando ve que las fuerzas del orden se apropian legítimamente de animales pertenecientes a la mal llamada comunidad. Alguien tendría que haberle dicho al cabro tontazo que eso de testificar en causas contra las fuerzas del orden es cosa de revoltosos.

En resumen, y para no aburrirte porque sé que quieres partir luego al estadio, yo, igual que tú, compatriota de mi alma, creo que le ponen mucho color los araucanos. Que agradezcan que hayan soltado al tal Patricio a quince kilómetros de su casa, para que haga ejercicio, y como decíamos antes, para esta gente unos kilómetros a pata pelá es como ir de aquí a la esquina, son muy duros y resistentes, peor que Caupolicán. No pasa nada, ya se acercan las vacaciones y todos hemos estado trabajando duro. Madonna canta en el Estadio Nacional esta noche y hay que aprovecharla a concho, porque si no para qué vivimos en esta dulce patria y pegajosa. Pasarla bien sin hacerse rollos también debería ser, nocierto, como un derecho humano, y más hoy que es 10 de diciembre.

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